Domingo 13 - B 2024

domingo 13 b 2024Marcos 5, 21-43

En el evangelio de hoy vemos a Jesús defender la vida de dos mujeres, una que estaba a punto de morir y otra que estaba muerta en vida. La primera era una niña de doce años. Su padre, Jairo, un jefe de la sinagoga judía, tenía una fe ciega en el poder de Jesús y no le importaros las críticas y las burlas que podrían venirle de los judíos piadosos que acudían cada semana a escucharle a él en la sinagoga. Y la segunda una mujer anónima, afectada por flujos de sangre

Podríamos titular este texto «dos en uno» o «dos por uno». Ya que en el relato evangélico de un milagro se inserta otro para aumentar el dramatismo del primero. Cuando Jairo, jefe de la sinagoga, llega a los pies de Jesús pidiendo la curación de su hija, ésta está gravísima, pero viva. Y Jesús se va con él para curarla.

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Domingo 12 - B 2024

domingo 12 b 2024Marcos 4, 35- 41

“Vamos a la otra orilla”: sorprendente invitación de Jesús a sus discípulos. ¿Qué se nos ha perdido en la otra orilla? Con lo tranquilos que estamos en esta… A saber qué es lo que nos vamos a encontrar en la otra orilla… Si es tierra de paganos…: algo de todo esto debieron pensar los discípulos al recibir esta orden de Jesús. Y encima, para ir a la otra orilla hay que atravesar el lago, y el tiempo amenaza tormenta… Cabe imaginar que los discípulos se embarcaron con pocas ganas y algún miedo…

Más de una vez en la vida escuchamos esta misma invitación del Señor Jesús: “ves a la otra orilla”, no te quedes donde estás, no te acomodes ahí…

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Corpus Christi - B 2024

Corpus Christi 2024Marcos 14, 12-16.22

Celebramos la solemnidad del Corpus Christi, la fiesta de la Eucaristía. Es el día de la caridad ya que el Cuerpo entregado y la Sangre derramada del Señor constituyen para nosotros la manifestación mayor del amor de Jesús a los hombres. San Agustín llama a la Eucaristía "sacramento de amor, símbolo de unidad, vínculo de caridad ". Sin la comunión no habría amor a los demás. Cada comunión debe hacernos crecer en el amor a los otros. La Eucaristía debe crear en nosotros la decisión consciente de ir hacia las otras y entregarnos a ellas. La comunión con Cristo transforma nuestra vida.

Jesús, en la Última Cena, se. hizo pan. Cuando hablamos de pan todos entendemos que es un alimento que nos sustenta y nos fortalece. Jesús quiso ser eso para nosotros un alimento, más bien espiritual que físico, pero que nos hiciera más fuertes por dentro. ¿Cómo? pues transmitiéndonos, cuando comulgamos, todos los valores que él vivió y enseñó a sus discípulos.

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Santísima Trinidad - B 2024

santa trinidad 2024Mateo 28, 16-20

La Iglesia nos invita hoy a recordar al Dios Trinidad, Lo celebramos dando gracias al Padre porque ha enviado a su Hijo para revelarnos, comunicarnos cómo es Dios y porque así nosotras podemos llamarle Padre.

Lo celebramos también dando gracias a Jesús nuestro hermano, el Hijo de Dios, en su vida nos deja ver cómo es nuestro Dios y nos ha enseñado a hablar con Él. Lo dijo en su diálogo con Nicodemo: “Quien me ve a mi ve al que me ha enviado”. Viendo a Jesús, viendo su vida, podemos intuir cómo es el Dios de Jesús. Dios no es una idea oscura y abstracta, ni una energía oculta, ni un ser solitario. Dios es amor desbordante, así es Jesús.

Y lo celebramos pidiendo al Espíritu que Jesús ha enviado sobre nosotras, que abra nuestros corazones y le aceptemos y le amemos.

La Trinidad es un misterio, de Dios sólo se puede hablar de forma aproximada y de su experiencia lo mismo. Siempre es difícil hablar de Dios y siempre corremos el riesgo de terminar hablando de nosotras mismas como si fuéramos dioses, o como si Dios fuese igual que un hombre.

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Pentecostés - B 2024

pentecostes2024JUAN 20, 19-23

Después de la celebración de la Ascensión y a los cincuenta días de la Pascua celebramos hoy el domingo de Pentecostés. Jesús que había dejado físicamente a los suyos, les prometió la llegada del Espíritu, el cual permanecerá siempre con ellos. Asumida la Resurrección, cuando la Iglesia está comenzando a formarse, el Espíritu Santo pasó a ser el protagonista de la salvación. Él se encarga de recordarnos el mensaje de Jesús; Él nos guía a la hora de interpretarlo de modo que siga siendo actual en el mundo de hoy y de todos los tiempos; Él es el que nos impide anclarnos en el tiempo y no evolucionar en lo que hay que evolucionar; Él nos purifica, nos enardece y nos templa para los duros trabajos del evangelio.

Escuchar la voz del espíritu no siempre es fácil. Se requiere mucha sinceridad ante nosotros mismos y ante la palabra de Dios. Alguna vez puede ser que creamos que nos habla, o que le escuchamos y lo que escuchamos de verdad es lo que nos gustaría oír.

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