Domingo XXXII -C
Lucas 20, 27-38
En el Evangelio escuchamos la pregunta “trampa” que le hacen unos saduceos a Jesús. Los saduceos eran un grupo de judíos que no creían en la resurrección de los muertos. Ante esta pregunta de los saduceos, con la que pretenden coger a Jesús, éste responde que tras la muerte nos espera una resurrección para la vida. Esta es la fe de los cristianos: que la muerte no es más que una puerta que nos hace salir de este mundo para llevarnos al mundo futuro.